.... me desperte para regalarte mis senos... despertaran tu boca...
Eran pálidos senos como aves tímidas
con olores despiertos de albas mojadas
ebrios pezones como alondras inquietas
pudoroso sabor a mujer
es domingo en las camas
imagine besarte
ardiente tu cuerpo
anhelante mi abrazo
palpitaciones perdidas de vulvas perfumadas
cuando tus ojos adornen mis pechos
sobre octubre brotaran néctares.
No hay mejor adorno para unos tímidos senos que el adorno de unos ojos anhelantes...bueno, quizás el de una lengua inquieta.
ResponderEliminarBesitos.
Los senos despiertan a los ojos anhelantes y ofrecen pasiones y porque no esperar también las lenguas inquietas.... gracias Aires por recorrer mi figura con tu dibujo....
ResponderEliminarLedeska